Unos 1.500 venezolanos posaron desnudos para el fotógrafo estadounidense Spencer Tunick frente a una estatua del Libertador Simón Bolívar y en otros espacios del centro de Caracas.
De este modo la capital venezolana se sumó a otras ciudades del mundo que también han servido de escenario para las fotografías de multitudes desnudas de Tunick.
Los venezolanos que se animaron a posar para el fotógrafo estadounidense, entre los que había hombres y mujeres de todas las edades, estaturas, siluetas y colores de piel, tuvieron a su favor el buen tiempo, con una temperatura en torno a los 20 grados.
La policía mantuvo un cerco en torno a las zonas utilizadas por Tunick, para que los pocos curiosos que se acercaron a esos lugares sólo pudieran ver el espectáculo de lejos.
La sesión, que obligó a cortar el tránsito en un sector del centro de Caracas, terminó sin incidentes a tempranas horas, cuando la ciudad comenzaba a desperezarse con la lentitud de un día festivo.
